¿Cuál es tu primera reacción cuando tus amigos quieren salir después del trabajo? ¿O cuando te das cuenta de que es hora de llevar a tu hija a su partido de fútbol? ¿O cuando recuerdas esa clase de spinning para la que te inscribiste?
Si las palabras «Estoy demasiado cansado» son las primeras que se te vienen a la cabeza, independientemente de cuánto hayas dormido la noche anterior, puede ser el momento de darle un vistazo a las razones por las que siempre te sientes cansado.
Existen varias razones por las que puedes sentir que no tienes energía para hacer nada. Algunas de estas pueden requerir una conversación con tu médico, pero otras pueden abordarse con algunos cambios en tu estilo de vida. Veamos las causas de la baja energía y si hay alguna que te parezca conocida.
Un horario de sueño inconsistente puede ser una de las razones por las que te sientes cansado todo el tiempo. Dormir es esencial para tu bienestar, al igual que el agua, la comida, el aire y el refugio. En su fervor por vivir la vida al máximo, muchas personas no le dan prioridad a descansar lo suficiente y dicen frases como: «¡Dormiré cuando esté muerto!».
Pero cuando pospones el sueño con regularidad, quedándote despierto hasta muy tarde varias noches a la semana mientras sigues levantándote para trabajar o lidiar con los niños todo el día, tu cuerpo empieza a decirte que debes relajarte.
Todos sabemos que quedamos cansados después de un entrenamiento largo. Pero ¿sabías que si nunca entrenas, también te cansarás? Investigaciones muestran que llevar un estilo de vida sedentario puede conducir a una sensación de cansancio durante el día.
Y si haces ejercicio, si no preparas tu cuerpo para un entrenamiento extenuante con una dieta nutritiva, el combustible adecuado antes y después de tu entrenamiento, mucha hidratación y descansos regulares, también te preguntarás: ¿Por qué no tengo energía?
Tu cuerpo necesita combustible, y por combustible nos referimos a alimentos saludables llenos de vitaminas, minerales y nutrientes, no hamburguesas de comida rápida, rosquillas de un compañero de trabajo o las latas de tu refresco favorito. La comida chatarra y los alimentos procesados que proporcionan grandes cantidades de carbohidratos refinados, como los que suele haber en una máquina expendedora de un lugar de trabajo, pueden afectar tus niveles de glucosa en la sangre, causando picos y caídas que te dificultan mantenerte despierto durante el día, sin energía para hacer nada.
El alcohol tampoco es el mejor combustible para el cuerpo. Tiene poco valor nutricional. Y aunque puede hacer que te sientas somnoliento inicialmente, también puede dejarte muy despierto en medio de la noche, lo que dará como resultado un nivel de energía bajo al día siguiente.
Por supuesto que una taza de café en casa o el latte triple con especias de calabaza que te tomas camino al trabajo pueden darte un impulso de energía necesario para iniciar tu día, pero la energía de la cafeína puede tener más de un efecto.
Si desarrollas un hábito por la cafeína y un día no consumes tu dosis diaria, puedes comenzar a experimentar la abstinencia de la cafeína, que incluye dolores de cabeza, disminución del estado de alerta y, adivina, cansancio.
Y si tomas cafeína demasiado tarde en el día, puede afectar tu sueño más tarde. La cafeína tiene una vida media de hasta seis horas, lo que significa que seis horas después de haberla consumido, la mitad de la cafeína sigue en tu sistema, lo que podría interrumpir tu sueño y causar que tengas una mañana aletargada. (¡Las bebidas de energía sin cafeína son una gran alternativa para disfrutar de un energizante por la tarde!)
¿Hay algún cambio importante en tu vida? ¿Empleo nuevo? ¿Tienes un recién nacido? ¿Tienes un familiar que está enfermo? ¿La pandemia mundial? ¿Todas las anteriores? Todos esos elementos pueden agregar gran estrés a tu día, dejándote mental y físicamente agotado. Si el estrés ocasional se acumula con el tiempo, puede llevar al agotamiento emocional.
¿Leíste todas las situaciones anteriores y todavía no tienes una respuesta a la pregunta, «¿Por qué estoy siempre cansado y sin energía?». Puede que sea hora de hablar con tu médico.
La fatiga o el cansancio excesivo pueden ser un síntoma de varias afecciones, como la diabetes, problemas de tiroides, anemia, depresión y apnea del sueño. Estar cansado todo el tiempo también es un efecto secundario común de muchos medicamentos.
Muchas de las causas de la baja energía se pueden abordar con algunos cambios en el estilo de vida. ¿Eres de los que no duerme lo suficiente? Aprende cómo crear una rutina de sueño para prepararte para un sueño saludable.
¿Eres más bien sedentario? Es hora de moverse. Y está bien empezar de a poco. Las investigaciones muestran que incluso el ejercicio de baja intensidad reduce los síntomas de fatiga.
¿Adicto a la comida chatarra? Es hora de elegir mejores opciones nutricionales y optar por una manzana en lugar de una golosina o una bolsa de papas fritas. Y asegúrate de que tus comidas sean balanceadas, con muchos granos integrales, proteínas magras, frutas y vegetales.
También puedes considerar aumentar tu ingesta de vitamina B, que combate la fatiga ocasional ayudando al cuerpo a obtener energía de los alimentos que comes. Puedes hacerlo con un suplemento de vitamina B o con alimentos altos en vitamina B.
Consulta Cómo combatir la fatiga y recuperar tu energía para obtener consejos adicionales. Para una examinación más profunda de tu estilo de vida y hábitos generales, visita el Wellness Recommender para realizar una evaluación y obtener recomendaciones y consejos personalizados diseñados para tus metas.
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