La transparencia en la industria alimentaria va en aumento
A menos que mordamos una manzana que hayamos cosechado nosotros mismos, preparemos huevos revueltos de la granja avícola cercana o comamos algún otro alimento producido localmente, lo más probable es que los snacks y las comidas que llenan nuestros platos cada día tengan una gran cantidad de ingredientes que quizás no conozcamos.
Si esto te hace dudar, tenemos buenas noticias. Gracias a la creciente tendencia a la transparencia y trazabilidad de los alimentos, es más fácil que nunca obtener información clara sobre la comida que compramos —desde cómo y dónde se cultivan las frutas y verduras, hasta qué tipo de ingredientes están en los alimentos envasados que llenan nuestras despensas y refrigeradores.
La transparencia y responsabilidad sobre alimentos y etiquetado son más importantes que nunca, ya que permiten que los consumidores tomen decisiones fundamentadas. Es importante contar con información nutricional veraz y precisa sobre los alimentos que le damos de comer a nuestras familias.
Esta trazabilidad —saber de dónde proviene nuestra comida— nos da seguridad sobre los alimentos que consumimos.
El impulso actual para obtener más transparencia alimentaria va más allá de la información nutricional que aparece en las etiquetas de los alimentos. La transparencia y trazabilidad de los alimentos a menudo significa detallar cómo y dónde se produce algo, e incluso explicar por qué es una opción saludable.
Para cumplir con la demanda de los consumidores, las empresas no solo están incluyendo más información nutricional en las etiquetas de sus alimentos, sino que muchas están incorporando la conversación sobre la transparencia alimentaria en sus páginas web, en las que invitan a las personas a conocer más sobre cómo se elaboran sus productos.
Esta es también una forma para que las empresas se involucren con los consumidores y generen lealtad a la marca a medida que comparten información que buscan los compradores exigentes. Veamos algunos beneficios de la transparencia alimentaria y las etiquetas de alimentos claras para que te sientas más informado la próxima vez que hagas las compras de la semana.
La transparencia alimentaria permite que los consumidores tomen decisiones fundamentadas
Quizás recuerdes las viejas bromas que se hacían sobre la «carne misteriosa» que se servía en la cafetería de la escuela cuando eras más joven. Sin embargo, hoy en día no saber lo que hay en tu comida no es motivo para reírse. El mejor beneficio de la iniciativa actual para promover la transparencia alimentaria es que las personas que están interesadas en saber qué consumen pueden asegurarse de que están comprando los mejores alimentos frescos y envasados, así como suplementos, disponibles para ellos.
Para muchas personas, educarse sobre lo que contienen los alimentos —desde los ingredientes exactos, hasta la información de trazabilidad sobre el origen de elaboración— les da la confianza para comprar un producto específico de manera habitual.
Por ejemplo, si sabes que las manzanas orgánicas del huerto cercano son empaquetadas y puestas a la venta en el departamento de productos agrícolas de la tienda donde sueles comprar, probablemente esa será la marca que comprarás cada semana. Lo mismo aplica para los suplementos con ingredientes obtenidos de plantas de calidad y cultivados en granjas orgánicas.
El equipo detrás de la marca Nutrilite™ sabe de esto. Su compromiso con la trazabilidad es extenso y transparente. Es por esto que los ingredientes utilizados para elaborar los suplementos Nutrilite se pueden trazar hasta las granjas donde se cultivan las verduras, las frutas y las hierbas empleadas para elaborar los extractos.
Se mantienen registros meticulosos que detallan los ciclos de vida de estas plantas, desde quién planta las semillas, hasta quién y cuándo las cosechan. Este tipo de honestidad y transparencia en la industria no solo hace que los consumidores se sientan mejor, además construye lealtad y seguridad detrás de una marca confiable.
En una era en la que la seguridad alimentaria a nivel global sigue siendo una gran preocupación, Nutrilite indica que sus clientes pueden tener la certeza de que la trazabilidad ha sido una prioridad desde que la marca fue fundada.
La transparencia alimentaria puede ayudarte a vivir según tus valores
Cada vez más, es posible que veas alimentos o suplementos etiquetados como «de origen sostenible». Es una señal de que los agricultores que producen los ingredientes usan prácticas más sostenibles y respetuosas con el medioambiente, siendo mejores para el planeta.
Para los consumidores que priorizan el medioambiente, esa información es importante porque los hace sentir seguros y confiados de que lo que están comprando para ellos y sus familias fue producido de manera sostenible.
Si bien algunas empresas se enfocan recientemente en la sostenibilidad, la marca Nutrilite ha priorizado las prácticas agrícolas sostenibles desde que su fundador Carl Rehnborg puso en marcha su primera granja hace más de 80 años, asegurándose de mantener suelos saludables sin herbicidas ni pesticidas químicos.
Ese enfoque continúa hoy en las cuatro granjas Nutrilite con certificación orgánica y en incontables granjas asociadas que deben seguir los estrictos estándares de sostenibilidad, a la vez que cultivan productos botánicos para los ingredientes de Nutrilite.
La transparencia alimentaria aumenta la variedad de opciones más saludables
La evolución de la transparencia y responsabilidad del etiquetado de alimentos ha impulsado a algunas empresas para que cambien los ingredientes de sus productos. Por ejemplo, si el etiquetado exige que algunas marcas de alimentos indiquen el nivel de ingredientes poco saludables presentes en sus productos, como las grasas trans, las marcas han tomado la decisión de reducir la cantidad de dichos ingredientes en sus productos. Esta es una gran victoria para aquellos consumidores que intentan consumir opciones más sanas.
Algunas empresas han hecho grandes esfuerzos para incluir en sus sitios web listas de ingredientes fáciles de entender y compararlas con otras cosas que los compradores podrían tener en sus despensas. Esta información adicional permite que los compradores se sientan mejor educados sobre lo que están comprando. En algunas etiquetas de empaques se incluyen los sitios web de las empresas para que los compradores consulten información adicional.
Garantizar que tus preferencias de alimentos se ajusten a las recomendaciones del médico
Una de las ventajas de la transparencia alimentaria es que la puedes aprovechar para mantenerte sano. Hasta hace un tiempo, las personas que tenían restricciones dietéticas o enfermedades como colesterol alto o hipertensión arterial podían tener dificultades para verificar que los alimentos que estaban comprando se alineaban con sus necesidades dietéticas especiales y las recomendaciones de su médico.
En la actualidad, las etiquetas de datos nutricionales requeridas en la mayoría de los alimentos preparados explican claramente los porcentajes de grasa, colesterol y sodio en cada porción. A menudo, muchos alimentos envasados van uno dos pasos más allá, agregando a la etiqueta palabras que identifiquen los alimentos como «bajo en sodio» o «sin sal agregada».
Consejos para leer etiquetas de alimentos
Leer las etiquetas de la información nutricional en los productos que compras es la primera y mejor manera de averiguar lo que contiene el paquete. Comienza con el clásico cuadro de información nutricional en la parte posterior de la lata, la caja o el envase.
En primer lugar, asegúrate de comprender la porción a la que se refieren todos esos números. ¿La porción corresponde al envase completo, a media taza o a una sola pieza del contenido del paquete? Este detalle marca una gran diferencia cuando examines cuántas calorías, grasas, azúcares y sodio hay en una porción.
En segundo lugar, cuando revises la lista de ingredientes, enfócate solamente en los primeros elementos de la lista. Estos son los que componen la mayor parte de lo que hay en el envase. Si ves una gran cantidad de azúcar o grasas dañinas entre los primeros elementos, lo mejor será buscar una opción más saludable o ingerir ese producto con moderación.
Por último, observa la parte frontal y los lados del envase para obtener información adicional que el fabricante ofrece a sus consumidores. Aquí es donde usualmente podrás encontrar información sobre si un alimento es bajo en sodio, libre de grasas, orgánico o no transgénico.
Si bien esto es un poco de trabajo adicional de tu parte, las empresas están invirtiendo en la transparencia y trazabilidad de la cadena de suministro, de manera que puedas tomar mejores decisiones para ti y tu familia en relación con los alimentos que compras.
Aprovecha toda esta información adicional para que sientas la seguridad de que estás tomando la mejor decisión. Y no tengas miedo de buscar más información acerca de las empresas a las que les compras, echando un vistazo a sus sitios web. A medida que la tendencia a la transparencia alimentaria continúe, se dispondrá de más y más información.