En nuestra búsqueda por encontrar los mejores y más nutritivos alimentos para nosotros y nuestras familias, muchos compradores se han convertido en detectives.
Ellos leen cuidadosamente las listas de ingredientes, toman nota del lugar en el que se fabricaron los artículos y, si están comprando en mercados locales, a menudo conocen a los agricultores que están detrás de los alimentos. En resumen, buscan un proceso de trazabilidad de calidad.
¿No deberíamos ser igual de curiosos cuando se trata de nuestros suplementos nutricionales? Una encuesta anual muestra que tres cuartos de los estadounidenses toman suplementos nutricionales.
Están tratando de tomar las mejores decisiones posibles para su nutrición. Pero esto plantea un problema: ¿Qué sabemos sobre la calidad de esos suplementos? ¿Cómo se fabricaron y qué ingredientes se utilizaron?
«Puedes leer las etiquetas para saber qué es lo que contiene un producto nutricional. Pero en un mundo donde la contaminación y la adulteración son riesgos reales, también necesitas saber por qué está ahí, de dónde proviene y cómo se produjo de manera responsable, para que puedas tomar decisiones fundamentadas», explica Sam Kilgore, gerente de Desarrollo de calidad de proveedores en Amway, que fabrica los productos Nutrilite™.
Ahí es donde entra en juego la trazabilidad de calidad.
Trazabilidad es saber de dónde provienen los productos y cómo se fabrican. Claro, la etiqueta indica que esas tabletas, cápsulas o gomitas contienen diversos ingredientes y vitaminas provenientes de plantas, pero también hemos visto informes de adulteración de comida, fraude alimentario e infracciones de seguridad en la industria.
La Administración de Medicamentos y Alimentos de EUA (FDA) también tiene una estructura de supervisión diferente para los suplementos, en comparación a la que aplica para los medicamentos. A diferencia de los productos farmacológicos que deben ser seguros y eficaces para su uso previsto antes de la comercialización, no hay disposiciones en la ley para que la FDA «apruebe» suplementos nutricionales por seguridad o eficacia antes de que lleguen al consumidor.
Debido a que los suplementos nutricionales no están regulados de la misma manera que los medicamentos, es importante aprender sobre el fabricante. ¿Cómo sabemos que estamos consumiendo lo que dice la etiqueta? Cada vez más la respuesta radica en el compromiso de la empresa con la trazabilidad de calidad, así como la disposición a mostrar y compartir abiertamente esa historia con sus consumidores.
El fundador de Nutrilite, Carl Rehnborg, utilizó prácticas pioneras de agricultura orgánica cuando comenzó a cultivar ingredientes Nutrilite para sus suplementos hace más de 85 años, trazando cada acción realizada en cada sección de su granja para garantizar la máxima calidad y los ingredientes botánicos más efectivos.
Hoy en día, el equipo de Nutrilite utiliza un proceso de trazabilidad detallado que comienza en una granja Nutrilite o granja asociada con certificación orgánica.* Este hace un seguimiento de cómo se eligieron las semillas de las plantas que se usaron para los ingredientes Nutrilite, quién las segó y dónde, qué fertilizantes se aplicaron, cuándo se cosecharon y quién lo hizo, y cómo se procesaron.
El registro cuidadoso continúa cuando se reúnen los ingredientes Nutrilite para la fabricación. Los científicos de Nutrilite realizan un estricto conjunto de controles de calidad, superando los estándares de la industria.
«Cuando los materiales llegan, se trasladan a la carpa de muestreo y contamos con personal de garantía de calidad que se encuentra allí abajo en el almacén; donde utilizaremos métodos de muestreo sanitarios para poder tomar muestras y luego entregarlas al laboratorio para su análisis», afirmó Kilgore.
El equipo de Nutrilite realiza más de 500,000 verificaciones de calidad cada año, buscando los rastros más pequeños de materiales no deseados y realizando pruebas microbiológicas completas de los alimentos, incluida la identificación de microorganismos, si se detectan.
«Cuando sostienes un producto Nutrilite en la mano, puedes saber que ha habido varios científicos tras bambalinas que identificaron y verificaron los precisos ingredientes botánicos en él», dice Jennifer Chuang, científica investigadora sénior de Nutrilite. «También sabes que esos ingredientes Nutrilite comenzaron como plantas que se cultivaron, cosecharon y procesaron en un ambiente limpio y seguro».
Para los consumidores, es importante saber de dónde provienen los ingredientes de los suplementos con un proceso de trazabilidad de calidad. Con esa información, podemos tomar las mejores decisiones y sentirnos bien sobre los productos que estamos comprando para nosotros mismos y nuestras familias.
*Los productos y los ingredientes no son orgánicos, a menos que se indique en la etiqueta del producto.
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